Pasaba
yo por aquí
así
como que no quiere la cosa,
a
ver si me agarra un brazo
y
me pone cocoroca.
A
los hombres de repente
hay
que mandarles mensajes,
con
los ojos, con los labios,
o
con un fuerte levante.
Es
que algunos son muy lesos
o
se hacen los Ramones,
no
ven que una les invita
con
el corazón al borde.
Al
borde de las llamas ay! sí!!
que
esta cosa esta que arde,
y
ni la manguera sacan
para
refrescar el desaire.
No
po!! mijitos lindos
que
los tiempos no están pa' eso,
a
una mujer se le atiende
aunque
les duela el pescuezo.
A
disfrutar del romance
que
nace con la chicha fresca,
o
fresca es la buena moza
que
le roba hasta la cabeza.
Rodan
cabezas sí!!
cuando
el vino se rebalsa,
y
en la pista las parejas
ya
ni las patas levantan.
Mire
que con el alcohol
no
sólo se entrega la llave,
también
hasta la virginidad
se
pierde en el fondo del valle.
Pásenla
re bonito
que
luego se van las fiestas,
y
a lo buen caballero
la
memoria no se despierta.
Pero
cuidaito ay sí!!
que
no llegue la princesa,
con
su domingo siete
a
golpearle a usted la puerta.
“Ceori”