Emerges
de las rocas, en acantilados, mirando al mar. Afortunada tienes la dicha de ver
dormirse el ocaso y despertar al alba saludando
entre la humedad de la bruma, con perfume marino, te quedas ahí fiel al viento y al roce de los
poetas que te hablan. “Ceori"
En la orilla te encontré,
En la orilla te encontré,
sobre el abismo
contemplando la inmensidad
y a la vez nada.
- No te acerques - Me
dijiste
- quiero estar sola-
La soledad no te lastima,
ni te traiciona.
Tan frágil te vi,
me dio miedo que cayeras,
y no poder alcanzarte.
Decidido me senté a tu lado;
sino puedo tocarte
...permiteme mirarte.
Asentiste y me quedé
mirando la inmensidad...
mirándote a ti....
Autor: Ania Mometais
Los Vilos, Chile 06 de enero de
2016