De vez en cuando la luna,
me enreda en su camino de plata,
mientras avanzo el sendero,
su luz misteriosa me atrapa,
detengo mis ojos hipnotizados
por su encanto misterioso
y en ella solamente
puedo ver el reflejo de tu
rostro.
Cuentan que cuando dos le miran
con el mismo pensamiento,
aparece una nueva estrella
en el firmamento,
que cuando envías un mensaje
su luz se hace intensa.
Y si una nube se cruza
mientras la luna añora,
es porque da un abrazo
al ser amado que ella adora,
él se cobija en su manto
y luego la deja desnuda
para que siga alumbrando
la torre del vigía.
Y cuando la luna duerme
muchos amantes la miran,
otros la usan de musa
dejando perfume de osadía,
y cuando por fin se recoge
para dar paso al nuevo día,
dicen que ella triste mira
como asoma el sol naciente,
solo alcanzan a verse segundos
en que le besa la frente,
y luego se va apagando
su cristal de plata fina,
para dejar que los rayos
de su amado sol la penetren.
Cuando se completa el llenado
hasta el último rincón
la luna rebosante de amor
se va poniendo dorada,
es porque el sol fecundó
la pasión que la pone en llamas
y la dejo para siempre
siendo su eterna enamorada.
“Ceori”